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Brasil, analogía de una Argentina en potencia.


“En Brasil se gobierna en coalición o no se gobierna“. Aquel famoso refrán brasilero, progresivamente se torna realidad debido a la ruptura producida dentro del frente gubernamental. La Fuerza del Pueblo y el Partido Democrático como principal promotor, abre pasos a una eminente destitución por medio del juicio político a la actual presidenta de la República Federativa, Dilma Rouseff.


A la sucesión de hechos que involucra a funcionarios del Gobierno por sobornos de la empresa estatal Petrobras, le siguieron manifestaciones callejeras , pérdida de popularidad del PT, la salida del gobierno del PMDB y la extenuante crisis económica, parece haber acelerado el impeachment que dio sus primeros pasos con la votación realizada el anterior domingo. Rozando lo absurdo, el nivel discursivo dentro del recinto, resaltó que la oposición brasilera tiene otras preocupaciones más importantes que las denuncias que perjudican al actual gobierno brasilero. De una totalidad de 513 miembros del Congreso ubicado en Brasilia, 367 votaron a favor del juicio político, 137 en contra, 6 abstenciones y 2 ausencias.


El destino de Brasil quedará ahora en manos de la Cámara Federal de Senadores de Brasil, de los cuales 47 ya declararon que votarán a favor de la destitución, 19 en contra y 15 todavía no brindaron declaraciones.


En el caso que se dé este resultado, el cargo será asumido temporalmente por el vicepresidente, Michel Temer, abandonando a su viejo aliado en las elecciones del 2010 y del 2014. El PMDB, se prepara para conducir las riendas del gigante latinoamericano.


Pero el imperioso deseo de repetir la elección de 1994 y convertirse en la principal fuerza electoral de Brasil, parecen muy lejanas de la realidad. En medio de un sistema político de fragmentación multipartidaria, Michel Temer según la encuestadora Datafolha cuenta con el 2% de popularidad y el 60% pediría su renuncia, debido a las implicaciones en el famoso caso Lava Jato.


Frente Cambiemos ¿Coalición de Gobierno?


Las coaliciones en Argentina no son una cuestión del pasado, el actual presidente Mauricio Macri, llegó al poder por medio de un acuerdo entre la Unión Cívica Radical, Partido Propuesta Republicana, la Coalición Cívica y una serie de partidos minoritarios que formaron la alianza de Cambiemos.


Es evidente la preocupación de los argentinos por los sucesos que están ocurriendo en Brasil, ya que se trata de uno de los principales socios económicos en la región y cualquier cambio en las políticas públicas de este país pueden llegar a repercutir en el nuestro.


La crisis política y económica de Brasil y el rol activo que tomó el Congreso en el limítrofe país, sumado a la última escisión que se produjo dentro del Bloque Cambiemos, desencadenó la formación del nuevo Bloque del Bicentenario por parte de los diputados tucumanos debido al desacuerdo con el rol de los aliados dentro de la presidencia de la nación. Esta situación, nos lleva a pensar cómo estará conformado y dividido el balance del poder dentro del Congreso Argentino de la coalición gobernante.


El Frente Cambiemos en la Cámara de Diputados, actualmente cuenta con 87 diputados nacionales, comandados por el diputado Cordobés de la UCR, Mario Negri, que actualmente se desempeña como presidente del interbloque.


El principal socio en la cámara de los representantes del pueblo, es la UCR, que conforma un Bloque compuesto por 36 miembros, el Bloque Pro presidido por Nicolás Massot, cuenta con 42 miembros de los cuales 5 responden a distintos funcionarios. Tres de los mismos pertenecen al partido Unión por la Libertad, María Laura Lopardo, José Luis Patiño y Paula Marcela Urroz, los otros dos son Guillermo Mario Durand del Partido Conservador Popular de Salta y la diputada por el Partido Demócrata de la Provincia de Mendoza ( Ex aliados del FPV ), Stella Maris Huczak.


Los otros nueve diputados se dividen entre: Coalición Cívica (4), Frente Cívico y Social de Catamarca (3), Libertad, valores y cambio (1) y el Partido Demócrata Progresista (1).


En la Cámara de Senadores, además de contar con una desventaja numérica, el oficialismo nacional cuenta con una segmentación de sus Senadores y la negociación y articulación con los gobernadores provinciales, funcionó para lograr la aprobación del acuerdo con los Holdouts y pocas leyes más.


Dentro del propio Senado, el Bloque Pro se encuentra marcado por diversas alianzas; es el caso de tres de los seis senadores que conforman el bloque. Marta Varela (Partido Recrear para el Cambio), Ernesto Martínez (Frente Cívico) y Pedro Poccard (Partido Proyecto Corrientes), forman parte del Bloque oficialista, pero no pierden su obediencia a sus referentes locales.


A su vez, los aliados del PRO cuentan con 8 Senadores de la UCR, 1 Senador de la Coalición Cívica y 1 Senador del Frente Cívico y Social de Catamarca.


Es evidente que el poder legislativo tendrá un rol central no solo en los medios, sino también en la actividad política Argentina, aunque el principal mandatario nacional cuente con un blindaje institucional ya que la línea de sucesoria está ocupada por políticos de su extrema confianza. A diferencia de nuestros vecinos regionales, la oposición tomó un rol de conciliación y negociación con el nuevo gobierno, exceptuando el Bloque del FPV que aun así, sufrió desgastes y desmembramientos en la Cámara de Diputados y desobediencias en el Bloque de Senadores. Con el desplazamiento de varios de sus miembros, llegó a conformarse el Frente Justicialista y un nuevo actor político sobrevaluado aunque clave a la hora de negociar los votos: Diego Bossio.


La actual situación de la Presidenta Dilma Rouseff y la crisis política de Brasil, al igual que la destitución del ex presidente Lugo, la suspensión temporal del Mercosur y Unasur de Paraguay, y el cambio de rumbo político y económico provocado por la llegada al poder de Cambiemos en Argentina, ha logrado que la atención internacional de los medios esté puesta en Latinoamérica. ¿Presenciamos la resurrección del poder legislativo en Latinoamérica? Quizás sea apresurado afirmarlo, aunque su desempeño, solo podrá ser juzgado por la historia de nuestros pueblos.



*Est. de Cs. Políticas/ Sec. Coor. Gral. de la Juventud Radical.

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